Homenaje a Baudelaire
“¡Querría haber parido mil serpientes voraces
antes
que dar el pecho a este hijo malhadado,
maldigo aquella noche de placeres fugaces
donde fue concebido mi castigo al
pecado!”
Baudelaire
No tengo idea para ser hijo
y soy
como un crisantemo amargo allá en el sitio;
como una piedra erecta en la llanura;
como una zarza negra en el camino;
o quizá, como un resuello fornicario;
o, como un latigazo reflejado,
o, como un enjambre rojo,
tal vez, como un zueco del pie izquierdo;
como un rosario de aceitunas secas
roto en dos pedazos.
No tengo idea para ser hijo
y soy
como la percha de un sastre paralítico;
como la mancha de todos los tinteros;
como un tortazo en la espalda del Quijote;
o quizá, como un pañuelo proletario;
o, como un conejo jugando a cuatro esquinas,
o, como un anuncio tuerto;
tal vez, como un contacto de lentillas;
como la tarta de dos novios muertos
repartida a cazos.
No tengo idea para ser hijo
y soy
como una cuchilla recta y después curva;
como un saco de ojos bien atado;
como la tripa de un obispo viejo;
o quizá, como un indio relajado,
o, como un jorobado de nostalgias;
o, como una patraña;
tal vez, como un escudo de marqués marica:
como una trenza rubia de culebras tensas
que va sangrando.
No tengo idea para ser hijo
y soy.
Félix
Imagen:https://www.blogger.com/
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