dissabte, 6 de setembre del 2025

Mala digestión

Con el primer rayo de luz, llegué ahíto de sangre y me acosté, pero hasta aquí me había seguido su marido. Le vi venir con la estaca de madera y un martillo. En el pecho sentí la punta dura. A punto de descargar el fatal golpe… desperté empapado de sudor.

Angustiado, descorrí la tapa del ataúd, saqué la cabeza y respiré profundo: de nuevo era de noche. 

Félix

Imagen:https://www.bloger.com/

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada