Miro para otro lado
No la encuentro.
Se ha perdido
entre las peripecias amargas del
pecado:
en los dientes de los niños que no
comen,
en la punta del fusil de los
soldados,
en
doble fondo, dobladillo y traficante,
en le demagogia del gobierno y aún
le voto,
en los restos que esparció aquel
coche-bomba,
en la minuta de los jueces
corrompidos.
en el dedo del tirano y en su madre,
en alguna mujer violentada,
en un clítoris de míticas culturas,
en la enREDada pedofilia de un cabrito,
en el turismo sexual de
visa-orgasmos,
en el cayuco emigrante sin papeles,
en los asilos de los viejos
yuxtapuestos…
¿Dónde está mi conciencia?
No la encuentro.
Entre las peripecias amargas del
pecado
se ha perdido,
mas
mi interés por reencontrarla es nulo,
miro para otro lado.
Félix
Imagen: https://www.google.es
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